Hasta este momento, se reportaban cinco muertos, entre ellos dos agentes, cinco policías heridos, cuatro de la PEI y uno de la PFP, asimismo dos viviendas quemadas, resultado del enfrentamiento que duró cerca de tres horas.
Las fuerzas federales y estatales aseguraron al grupo de sicarios 7 armas largas calibre 7.62 x 39 milímetros, 6 armas largas calibre .223 para rifle R-15, tres granadas de fragmentación, seis pistolas de diversos calibres, así como dos vehículos Chevrolet, tipo sedán.
Los hechos más violentos se suscitaron a espaldas de conocido centro comercial ubicado sobre el Periférico. Los sicarios desde la parte alta de un cerro disparaban ráfagas tras ráfagas y arrojaban granadas contra los policías. Asimismo, y donde culminó el enfrentamiento, fue en un domicilio de la calle prolongación Kennedy y calle Hilario Gavilondo.
Cerca de una hora los sicarios se atrincheraron en la vivienda marcada con el número 80, desde las ventanas estos disparaban. Autoridades de los tres niveles contestaban las agresiones y de tanto impacto que recibió el inmueble éste comenzó a incendiarse. Asimismo se dijo que militares lanzaron granadas de fragmentación y gas lacrimógeno, que obligó a los sicarios a rendirse.
Se dijo que dos hombres se entregaron y que en el interior de la casa había dos personas muertas.
Por su parte, la PGJE informó que uno de los sicarios confesó el crimen cometido contra el Director de la PESP, Juan Manuel Pavón Félix.En el enfrentamiento participaron elementos de la PEI, PESP, PFP, AFI, Policia Municipal y militares.
La lluvia de balas y granadas sembró el terror entre vecinos de las colonias Mediterráneo, la Kennedy, Granja y Pueblo Nuevo, principalmente.
Uniformados y civiles quedaron entre el fuego cruzado. Los accesos a la Kennedy por el periférico y la Obregón fueron cerrados, entre otras rúas.
Decenas de oficiales resguardan el Centro Médico, donde están siendo atendidos los agentes heridos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario